Sigo loco por ti.

Lamento decirte que sigo loco por ti, que sigues quitándome el sueño y haciendo que me quede hasta las tantas pensando en ti.
Lamento decirte que si vuelves aquí estaré, estaré esperándote con las ganas que tiene un escritor de escribir, estaré aquí sin dejar de hacerlo todo por ti.
Joder, vuelve. Vuelve, por lo que más quieras, vuelve.
No paro de suplicarlo, pero vuelve. Te lo imploro.
Fuiste, eres y serás quien me haga feliz, quien sea mi vida y quien la posea por partes iguales, y es que maldita sea, no sé qué hacer sin ti. No sé qué hacer ahora que no te tengo, no sé qué hacer ahora que no estás a mi lado...
Necesito oír tu voz, escucharte decirme que me quieres y todas esas cosas bonitas que me decías a pesar de que estés a seiscientos kilómetros...maldita sea, ya estoy llorando...
Estos textos van a acabar conmigo, ya van tres noches durmiéndome a las tantas y escribiéndote a las tantas de las tantas...¿qué cojones estoy haciendo? ¿Qué estoy haciendo pidiéndote que vuelvas? Si quisieras volver ya lo habrías hecho...o eso supongo...
Vuelve, por favor, vuelve... ¿No te das cuenta de cuánto te amo, de cuánto te divalidro? Es que...no tengo palabras. Lo siento, no las tengo...
Te divalidro.